viernes, 3 de abril de 2015

AUTISMO Y PICTOGRAM ROOM, UNA OPCIÓN GENIAL PARA LA SOCIABILIDAD, EL JUEGO Y EL MOVIMIENTO

Las terapias más avanzadas para abordar la sintomatología de los Trastornos del Espectro del Autismo (TEA) se centran en conseguir una comunicación social más funcional. Este objetivo, no solo se alcanza interviniendo en las áreas puramente verbales, sino que además se deben trabajar ciertos prerrequisitos esenciales para que la comunicación se produzca.

¿Qué es Pictogram Room?

Pictogram Room (la Habitación de los Pictogramas) es una herramienta muy novedosa y dinámica, que permite, mediante un entorno virtual, reforzar las técnicas empleadas para la terapia de personas con TEA. Al mismo tiempo este sistema dispone de diferentes tipos de ejercicios y tareas orientados a trabajar funciones como la imitación y la atención conjunta así como el desarrollo del juego y la interacción social. Otra de las novedades de esta herramienta es la posibilidad de abordar directamente las áreas propioceptivas. La propiocepción es el sentido que informa de la posición de los músculos y la capacidad de sentir sus límites. Se trata de un sistema regulador del movimiento que interviene en el desarrollo del esquema corporal y la relación del sujeto con el espacio. También se encuentra a la base de las acciones motoras coordinadas. Otros sistemas con los que interactúa son el control del equilibrio y la coordinación de los dos lados del cuerpo.

Un elemento muy atractivo de la herramienta es que sus características permiten que la intervención sobre los objetivos descritos sea más motivadora y divertida. Además, es posible adecuar los ejercicios a los gustos y preferencias del niño o adulto con autismo, personalizando el material visual dentro de lo que más le estimulen (vídeos y música), convirtiéndolo, más si cabe, en una herramienta ajustada a sus motivaciones.

Pero quizá la mayor virtud de Pictogram Room sea lo divertido que es, tanto para el niño como para sus terapeutas. Esta visión de “vamos a pasarlo bien” hace que sea extremadamente atractivo, tanto que puede ser usado como un refuerzo positivo, y una forma de mejorar muchos de los aspectos que se trabajan en el autismo, de forma divertida. El niño disfruta de la experiencia, su terapeuta también, y se genera cierto contagio de ¡lo pasamos bien!, convirtiéndose por tanto en un momento deseado y que además genera un efecto positivo en los procesos de atención conjunta, imitación, sociabilidad, turnos, fomento de la comunicación, movimiento, control espacial y muscular, propiocepción,…, que nos ayudaran de sobremanera en el día a día de la vida de la persona con autismo.

¿En qué consiste?

Mediante un sistema de cámara-proyector, y a través del reconocimiento del movimiento, se consigue reproducir la imagen del propio jugador aumentándola con una serie de elementos gráficos y musicales que guiarán su aprendizaje. Para utilizar este proyecto, se necesita un PC con Windows 7, el sensor Kinect® y una superficie de proyección (televisión, pantalla o pared) en la que visualizar las imágenes de La Habitación de los Pictogramas (información e imágenes obtenidas directamente de la web de Pictogram Room ).

¿Qué ejercicios contiene Pictogram Room?

Antes de indicar los ejercicios es importante destacar que los pictogramas son el sistema de comunicación alternativa más comúnmente utilizado en las personas con Autismo, pero hay ocasiones en las que la comprensión de la imagen les puede resultar dificultosa. Pictogram Room permite la superposición del pictograma al objeto real. Esta función del programa posibilita que las personas con autismo puedan entender mejor lo que están viendo ya que la conexión entre el pictograma real y la imagen en tiempo real facilita este proceso.

Los ejercicios que integran el programa de intervención mediante esta herramienta se engloban en 4 conjuntos: El Cuerpo, las posturas, Señalar e Imitar.

El cuerpo: Se incluyen un conjunto de actividades con las que trabajar el esquema corporal, mediante ejercicios en los que el niño debe prestar atención tanto a sus propios movimientos como a los del muñeco.
Las posturas: En este conjunto se aumenta la dificultad con respecto a los ejercicios realizados en el conjunto anterior. El niño debe aprender a adoptar varias posturas y a diferenciarlas.
Señalar: Incluye actividades que permiten aprender tanto a señalar como a entender como otras personas señalan con la mano o con la mirada.
Imitar: El objetivo de estos ejercicios se centra en trabajar aspectos psicomotrices de la imitación intercambiando roles de observador y moderador. Es posible incluso adoptar el rol de algún personaje.

Podéis encontrar más información sobre este recurso en:



No hay comentarios:

Publicar un comentario